Lo dijo la abogada de la familia de Roque Centeno, uno de los dos pacientes fallecidos en la Clínica del Sud.
«La familia se vio sorprendida por la denuncia y desconoce qué pasó» Lo dijo la doctora María Eugenia Bonzi, abogada de la familia de Roque Centeno, uno de los dos pacientes fallecidos en la Clínica del Sud.
Destacó que los familiares declararon el pasado 3 de agosto ante la fiscalía y ahora esperan el resultado de las pericias.
Este jueves a las 11 de la mañana se realizará la pericia clave sobre las muestras recogidas en los cuerpos de los dos pacientes que fallecieron en la Terapia Intensiva de la Clínica del Sur.
Así lo confirmó a TD Digital el abogado del doctor Martín Isa, quien confió en que los resultados se conocerían el viernes.
Con el análisis químico el fiscal contará con la prueba fundamental para decidir si avanza en una imputación ó desestima la denuncia.
El funcionario judicial recibió ayer el expediente que se encontraba en la Unidad Judicial y analiza las historias clínicas de las víctimas. En las últimas horas declararon los médicos de cabecera y otras personas vinculadas a la clínica privada.
“Es posible”
El doctor Eduardo Massa, abogado del médico Martín Isa, había señalado en diálogo con Telediario que “siempre es posible detectar droga en el cuerpo”, aunque resaltó que “el tema es saber la cantidad y la forma en que ingresó”.
“Me informan que hay formas físicas de detectar cuando se aplica el potasio en bolo, es decir, de una sola vez. Incluso lo podría detectar el médico forense en una autopsia. Este procedimiento se ha realizado, las conclusiones se han notificado al fiscal y supongo que la autopsia no ha advertido rastros del potasio”, manifestó.
Al ser consultado sobre si el médico tomó contacto con la familia de las víctimas, Massa dijo que “habló con allegados de uno de ellos y no lo pudo hacer con otros familiares porque la denuncia se produjo cuando velaban a estas personas”.
Residente
Ante el fiscal Di Santo declaró el pasado lunes un médico residente de la Terapia Intensiva de la Clínica del Sur, en medio de la investigación por la muerte de dos pacientes a quienes se le habría inyectado una dosis irregular de potasio.
El profesional estaba asistiendo a otros pacientes cuando ocurrieron los hechos y dijo que no observó “nada” de lo denunciado por la enfermera.
Según indicaron a TD Digital fuentes confiables, el médico relató la actividad en el lugar y resaltó que se enteró de lo sucedido “el día después” de los hechos.
Sostuvo que trabajó hasta últimas horas y no fue notificado sobre las inyecciones de potasio que se les habría aplicado a los pacientes.
Además, resaltó que tampoco pudo observar que hubiesen ampollas de la droga investigada en los recipientes de desechos patógenos.
Por ahora, los investigadores no tienen previsto citar a directivos de la clínica, aunque continuarán con las testimoniales de los profesionales médicos de cabecera de las dos víctimas fatales.
El médico Martín Isa, denunciado por la enfermera el pasado martes, no determinó aún los peritos para el análisis científico y tiene tiempo hasta mañana a las 10 para designarlos. El especialista no está imputado y solo fue citado para ser notificado de la pericia.
La testigo
Tres eran las personas que se hallaban en la Terapia Intensiva de un centro médico privado cuando fallecieron dos pacientes, en forma casi simultánea. Una de las protagonistas era la enfermera que denunció a un médico por la presunta inyección de altas dosis potasio a dos personas, quienes finalmente murieron.
Por el hecho, se inició una investigación judicial a cargo del fiscal de Instrucción Javier Di Santo, en la que aún no hay imputados.
La tercera persona en el lugar es también una enfermera que declaró ayer ante el fiscal y admitió haber escuchado el diálogo que mantuvieron la denunciante y el médico, en el que la mujer le reprochaba haberle inyectado la droga en forma irregular a los pacientes, un hombre y una mujer con enfermedades terminales. “¿Para qué prolongarle la agonía?” le habría respondido el terapista a la enfermera.
Sin embargo, la testigo señaló que no observó cuando le habrían inyectado la droga a las personas ni tampoco pudo reconocer las ampollas que el médico habría arrojado en un recipiente.