Desde el Concejo intentan determinar cuántos están en lugares no permitidos y las condiciones. «Hay posiciones divididas ante la prórroga», reconoció Scoppa. El edil sostuvo que «no se fue monitoreando el plazo inicial que se había dado a los empresarios»
Desde el Ejecutivo impulsan una prórroga de 2 años para el traslado de los depósitos de agroquímicos ubicados en zonas urbanizadas. El proyecto surge luego del vencimiento del plazo que ya había sido otorgado hace 5 años.
Desde la Comisión de Planificación del Concejo Deliberante pidieron informes al Edecom y al Ministerio de Agricultura de la Provincia «para que se informe cuántos depósitos hay en Río Cuarto y en qué condiciones se encuentran»
«No hay ninguna decisión tomada porque existen opiniones divididas ante la prórroga de dos años. Queremos conocer el proyecto del Centro Logístico de Agroquímicos que impulsan los empresarios y es necesario asegurar que no se dilapide otro plazo más», expresó el concejal del Encuentro Ciudadano, Eduardo Scoppa.
El edil sostuvo que «no se fue monitoreando el plazo inicial que se había dado a los empresarios» y recalcó que «si no hay un seguimiento, con metas, no tiene ningún sentido hacer una prórroga».
«La condición de seguridad rige en leyes provinciales y si hay irregularidades hay una responsabilidad compartida entre la Provincia y el municipio», opinó.
La propuesta oficial
En diálogo con Telediario el secretario de Planificación, Alejandro Martí, manifestó que “la cámara que nuclea a los expendedores pidió 4 años y hemos evaluado un proyecto para trabajar en dos años”.
– Ya se les había otorgado un plazo de 5 años…
– Es correcto. La mayoría de los depósitos que no estaban ubicados en lugares habilitados se trasladaron y algunos se quedaron. Nos parecía adecuado dar un nuevo plazo para trabajar en un proyecto del parque de depósito de agroquímicos.
– La medida no implica premiar a quienes no cumplieron pese a que se les dio un plazo prudencial…
– Si, en realidad se puede considerar que son incumplidores. Lo que tuvimos en cuenta para otorgar las habilitaciones fueron las condiciones. Cumplían con las exigencias que fija la legislación provincial. No son actividades inseguras. Vamos a hacer algo que no se hizo en el plazo anterior y vamos a controlar el avance en las obras.
– Cuando los concejales hicieron un recorrido por las empresas advirtieron que algunas no cumplían con requisitos mínimos ¿Han hecho un nuevo diagnóstico?
– Tenemos registrado dentro de estos pocos que hay uno que no puede continuar como depósito de agroquímicos porque no cumple con las medidas de seguridad mínima. Será clausurado ó deberá cambiar de rubro.
Plazo vencido
En Río Cuarto son 9 las compañías que incumplen la ordenanza 1371, vigente desde el 2007. Concejales de la comisión de Planeamiento hicieron un recorrido por las firmas afectadas y detectaron “un preocupante contexto, con riesgo potencial para vecinos, centros de salud y escuelas”.
La legislación municipal otorgaba un plazo de cinco años, “contado a partir de la fecha de sanción de la presente ordenanza-25 de abril de 2007-, para que las empresas dedicadas a la comercialización y depósito de agroquímicos ubicadas en sectores no permitidos se trasladen”
En el artículo 2 se adviritó que las firmas ”deberán presentar ante la Dirección General de Planeamiento Urbano, en un plazo no mayor a 90 días, un Plan de Prevención de Accidentes y un Plan de Contingencias que contemple la seguridad de las personas, bienes y recursos naturales que se encuentren en un radio no menor de 150 metros a la redonda del depósito de agroquímicos”.
Previo a su traslado al lugar autorizado, la Empresa debía “presentar el correspondiente estudio de Impacto Ambiental y los planes de prevención y contingencias para el nuevo emplazamiento”
La concejal del Interbloque Claudia Bringas había manifestado que “algunas firmas no tienen las mínimas medidas de seguridad, salidas de emergencias, ni espacio para que ingrese Bomberos”
“En el recorrido que realizamos con otros ediles observamos que una de las empresas que comenzó a mudarse estaba a media cuadra del ex Hospital Cabrera y otro distrbuidor está próximo a la Maternidad y la escuela Bartolomé Mitre”, aseveró.
La edil sostuvo que “los comercios de agroquímicos deberían reubicarse en zonas industriales. En toda la ciudad hay 22 locales, pero hay una parte que no cumplió”.
Por su parte, el tesorero de la Cámara Empresaria de Distribuidores de Agroquímicos, Semillas y Afines de Córdoba Walter Grünig reconoció en diálogo con Telediario que son 9 las firmas que deberían relocalizarse.
Señaló que le propusieron al Ejecutivo y al Concejo Deliberante crear un área específica para la radicación de este tipo de depósitos, aunque solicitaron una prórroga de 4 años para la instalación del predio, un plazo que no todos los ediles están dispuestos a otorgar.
En los campos
La problemática alcanza también a la producción agrícola que aplica los productos en los campos de la región. Ambientalistas advirtieron sobre el impacto en regiones urbanas y el río Cuarto.
“Es espectacular la cantidad de agroquímicos que se coloca en la cuenca media y alta del río” había señalado el ingeniero Horacio de Yong, presidente de la Comisión en Defensa de las Costas del Río, al hacer referencia al impacto de la tarea agropecuaria – y en particular con la siembra directa – sobre el principal recurso hídrico de la ciudad.
En la tercera entrega de la investigación especial “Agua que no has de beber” la ingeniera Cristina Bologna, ex titular de EMOS, señaló que “en este boom con excelentes precios y rindes que tiene el campo solo se debaten las retenciones y no sobre el impacto de los agroquímicos en el río y las napas”.
Por su parte, Mónica Blarasín, geóloga de la Universidad, destacó que “al río pueden llegar contaminantes por problemas de deforestación en la cuenca y el gran uso de agroquímicos”.
“También pueden caer residuos por los basurales que se desarrollaron sobre el lecho”, indicó.
Blarasín aclaró, de todos modos, que el agua que consumimos no proviene del río sino de sus corrientes subterráneas.
El adecuado proceso de autodepuración del río permite que se eliminen contaminantes. La situación se agrava con las napas subterráneas.
Adriana Cabrera, docente de geológia de la UNRC, admitió que “las corrientes subterráneas son más difíciles de descontaminar”.
Entre las leyes, hay trampas y olvidos. A la falta de controles se sumó una amplia zona gris de responsabilidades que el río dejó correr.
Por Pablo Callejón (callejonpablo@yahoo.com.ar)
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