Con angustia, River superó como local a Boca Unidos de Corrientes por 2 a 1 y se colocó, al menos transitoriamente, como único líder del campeonato de fútbol de Primera B Nacional, disputada parcialmente la fecha 36.
Lucas Ocampos abrió el marcador para River a los 33 minutos del complemento, Elvio Fredrich igualó el encuentro a los 36, pero Rogelio Gabriel Funes Mori puso el 2 a 1 definitivo a los 42. Rosario Central, que llegó como puntero a esta jornada, se enfrentará mañana en Santa Fe, como visitante, con Patronato de Entre Ríos, desde las 14.00.
River lidera el certamen con 70 puntos, Central lo sigue ahora con 69 y un partido menos, detrás avanza Instituto con 67 y cuarto está Quilmes con 66, completándose así los dos puestos que otorgan ascenso directo y los dos que llevan a los equipos a las promociones. En el partido que se jugó en Núñez, los goles estaban «guardados» en el banco de suplentes y llegaron todos sobre el final.
River llevó la iniciativa desde los primeros minutos y se mostró más incisivo, fundamentalmente por las proyecciones de David Trezeguet, mientras que falló al intentar definir, sobre todo a través de Daniel Villalva. La visita intentó defenderse con una última línea, nutrida y expeditiva, actitud que lo llevó a privilegiar el contragolpe. De esa manera, Boca Unidos llegó esporádicamente con jugadas de pelota parada.
No pudo inquietar River con su juego asociado y no supo definir Boca Unidos a través de los contragolpes. Las ocasiones que dilapidó la visita provocaban dolores de cabeza al entrenador, Darío Ortíz ya que por ejemplo a los 38, Aldo Visconti remató a al techo de la platea baja y apenas cuatro minutos después, Cristian Núñez mandó otro balón rumbo al cielo desde el punto penal.
La mala fortuna le impidió anotar a David Trezeguet a los 8 del segundo tiempo, cuando tocaba al gol pero impactó con el balón la parte trasera de su compañero Fernando Cavenaghi. Cerca de los 20 minutos, otra vez estuvo cerca Boca Unidos a la salida de otro contragolpe y el arquero Daniel Vega sacó providencialmente, con un pie, cuando tocaba al gol el ingresado Fredrich.
Esta jugada provocó una reacción negativa del público de River, que reclamaba «huevos», pero lo cierto es que el local llevaba la iniciativa y no encontraba los caminos al gol, dentro de un área generalmente taponada por una barrera de siete defensores como mínimo. A los 27 minutos, Cavenaghi quiso apostar por la fórmula que en estos casos suele abrir los marcadores, los tiros de media distancia, pero no tuvo puntería y enseguida fue reemplazado por Rogelio Gabriel Funes Mori.
Pero el secreto del gol de River residía en otro jugador que había permanecido en el banco de suplentes, Lucas Ocampos, quien entró en reemplazo de Daniel Villalva y a los 33 minutos del
segundo tiempo, conectó con un salto y de derecha una asistencia de cabeza tras una especie de córner corto y venció toda resistencia de Boca Unidos.
Fredrich también guardaba un «secreto» ya que llegó desde el banco de suplentes, mejoró el ataque de su equipo y, cuando recibió lo que era el resultado de un contragolpe perfecto, definió con la fineza que no habían exhibido sus compañeros. El encuentro ganó en emotividad y produjo que los dos comenzaran a buscar, de modo que se abrió la defensa visitante y a los 42, Rogelio Funes Mori –otro ingresado- paró la pelota con el pecho en el área y encontró el hueco para meter un disparo impresionante y poner otra vez a su equipo en ventaja.
Del cuarto al vigésimo, las posiciones siguen así: Boca Unidos, 54; Gimnasia La Plata, 53; Almirante Brown, 52; Aldosivi, 51; Patronato, Defensa, Ferro, 50; Merlo, 43; Independiente Rivadavia, 42; A.Tucumán, 41; Huracán, 40; G. Brown, 38; Desaparados, 33; Gimnasia (J), Atlanta, 31 y Chacarita, 26.