Se trata de 7 unidades habitacionales que iban a otorgarse a afectados del ex Chino, quienes rechazaron ser relocalizados. Ahora, la Provincia decidió reasignar las casas pero quienes habían sido erradicados aseguran que existía una promesa para trasladar a sus familiares al lugar.
Técnicos del Ministerio de Desarrollo Social arribarán el lunes a Río Cuarto y evaluarán la entrega de las viviendas que iban a ser destinadas a vecinos del barrio Chino y que están ubicadas al este de barrio Alberdi.
Se trata de 7 unidades habitacionales que iban a otorgarse a afectados del ex Chino, quienes rechazaron ser relocalizados. Ahora, la Provincia decidió reasignar las casas pero quienes habían sido erradicados aseguran que existía una promesa para trasladar a sus familiares al lugar.
Ayer, un grupo de vecinos realizó una fuerte protesta en el predio donde el Gobierno de Córdoba construyó las nuevas viviendas, entre Pasteur y Entre Ríos. Los manifestantes se concentraron después de las 16 y realizaron una quema de cubiertas ante la mirada de varios agentes policiales que llegaron al sector.
Una de los afectadas, de apellido López, señaló a Telediario que fueron erradicados del predio frente al Centro Cívico con la promesa de que sus hijos también recibirían una casa.
“Lucho para que le den una casa a mi hija que no puede pagar alquiler. Fui a hablar con Franco Miranda y él me dijo que no me iban a dar una casa porque estaban para las familias que faltaban trasladar desde el barrio Chino y resulta que ahora traen gente de todos los lados, menos del barrio. Me veo obligada a usurpar una casa porque no cumplen con lo que dicen”, señaló.
Añadió que crió sus 8 hijos en el sector sobre la ribera del río y tras la construcción del Centro Cívico decidió trasladarse a su nuevo hogar.
Otro de los damnificados afirmó que las promesas de viviendas también alcanzaban a personas que habrían residido en el sector erradicado pero no lograron ser incorporadas inicialmente en el plan pese a “estar censados”.
“Conocemos a la gente del barrio, aunque han traído personas que no son de acá. A mi hermana la habían censado y ahora no le quieren dar la casa”, afirmó una mujer que acompañaba la protesta frente a las viviendas ya concluidas.
Los vecinos amenazaron con usurpar las viviendas y rechazaron que les entreguen dinero para afrontar el alquiler de casas para sus hijos.
“No puedo esperar que me dejen a mi chica en la calle, embarazada. Es muy doloroso”, manifestó la mujer de apellido López.
“Tenemos autorización”
Por su parte, una de las familias que recibió las polémicas viviendas destacó que fueron autorizados “por Laura Ficco”, funcionaria del gobierno provincial y señalaron que “están todos los papeles en regla.
“A ellos le entregaron la casa y en ningún momento han usurpado. Hay papeles, todo. Estaban en la calle, no tenían a donde vivir. La señora Laura Ficco se apiadó de ellos y le consiguió una cosa”, destacó una mujer que hizo “gestiones” por la vivienda.
La nueva dueña del lugar dijo que residían en Alberdi y no tenían relación con el barrio Chino. “Gracias a ella que conocía a Laura Ficco conseguimos esta casa. Esta mañana nos avisaron que tenían la casa lista y nos dieron la autorización. La felicidad era grandísima y cuando vimos todo esto se nos vino el mundo abajo”, manifestó.