El 9 de mayo se define si la firma cae en la quiebra. Hay 3 ofertas, pero solo una se formalizó ante el juez. Los socios valuaron en un millón de dólares la firma, pero finalmente aceptarían un millón de pesos y la promesa de una inyección económica de 6 millones de pesos para reactivar la empresa.
El próximo 9 de mayo, la histórica firma Jumalá, con más de 50 años de industria alimenticia en la ciudad, se definirá entre la venta de sus activos ó la quiebra. El Día D estipulado por el Juzgado Civil de Tercera Nominación exige a los actuales administradores de la firma a encontrar una salida al pasivo real de 2.617.964 pesos.
A la deuda judidializada se sumarían otros pasivos por verificación tardía y por deudas laborales posteriores al 13 de diciembre del 2010 cuando Jumalá decretó el concurso de acreedores.
Aunque hubo tres ofertas para adquirir a la firma, solo una se planteó formalmente ante el Juzgado y las otras dos ya habrían sido desestimadas por los administradores.
Los socios de Jumalá valuaron en un millón de dólares la firma, pero finalmente aceptarían un millón de pesos y la promesa de una inyección económica de 6 millones de pesos para reactivar la empresa.
Los interesados tendrían domicilio en Santa Fe y afirman contar con experiencias en este tipo de empresas.
En el Juzgado Civil Tercera Nominación esperan que el 9 de mayo los dueños presenten una propuesta de acuerdo con los acreedores que incluya la venta.
Si el convenio no se firma, se declarará la quiebra y comienza un periodo en que terceros puedan comprar la empresa, en una venta pública. Se abrirían 5 días para inscribir las propuestas y un nuevo periodo para analizarlas. Es una carrera de la que solo participan los nuevos ofertantes.
En esta última alternativa, incluso los trabajadores podrían crear una cooperativa, algo que los empleados por ahora rechazan.
Todo haría prever que empresarios y obreros aspiran a una venta de Jumalá para que la compañía no cierre y hasta pueda recuperar su espacio comercial.
La carrera contrarreloj llega a su fin y más de 40 familias esperan que el desenlace incluya la postal de la reactivación de Jumalá.
Por Pablo Callejón (callejonpablo@yahoo.com.ar)
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