Nuestra ciudad hoy vive una realidad triste que se ve reflejada por la cantidad de perros que antes de su abandono estaban en un hogar familiar.
Lo que lleva a muchas familias a dejar esos animales en estado de abandono total son cálculos económicos y una gran falta de predisposicion por tratar de mirar todo lo bello que puede dar,con su sola presencia en una casa de familia, un perro.
Lo primero que enseñan los perros a nuestros hijos es la responsabilidad. Los chicos ya desde pequeños aprenden que el perro siente frio, calor, tienen sed,hambre, debe realizar sus necesidades, que tiene que jugar, y que tambien quieren que lo acaricien. De esta forma los niños desde pequeños incorporan el valor de la responsabilidad por el otro, la solidadridad y el compañerismo.
Lo mas importante que resulta de esta relación es, que con el pasar del tiempo, y el perro crecer junto al niño, el pequeño ve como sus cuidados van dando resultado. Cuando ve que el perro al comer crece, cuando el perro juega con él, el resultado de la relacion, la armonía que produce le genera mayor confianza en si mismo. Es decir, la relación entre el perro y el niño repercute en su autoestima personal.
Hay mucho más por agregar como razones por las cuales cada niño, cada familia, y cada persona en general debería tener una mascota en su casa.
Cada uno de los que tenemos una sabemos que son agradecidos, compañeros, cariñosos. No hay nada más lindo que entrar a casa y que nuestro perro o nuestro gato nos este esperando para darnos y para recibir un mimo.
Que el día del animal y la realidad en nuestra ciudad sirvan para que cada uno de los riocuartenses tomemos conciencia y asumamos la responsabilidad que corresponde por nuestros animales y por aquellos que se encuentran en estado de abandono.