Desde el INADI niegan haber recibido la denuncia de Velázquez

0
Compartir

El afectado había señalado en declaraciones periodísticas que realizó el planteo por la negativa de un mozo a servirle el desayuno a una niña. El organismo se comunicó con el músico riocuartense y negó haber recibido la denuncia.

Desde el INADI Córdoba negaron haber recibido la denuncia del cantante Miguel Velázquez sobre la presunta negativa de un mozo de un bar céntrico para servirle el desayuno a una niña que pedía monedas en el lugar.
Velázquez había señalado que realizó la denuncia, pero la licenciada Adriana Domínguez negó que esto haya ocurrido.
«Nos comunicamos telefónicamente con él y nos dijo que la estaba presentando, pero no fue así. Esperamos su testimonio para actuar, aunque es un caso que debe ser analizado. También nos dijo que había hecho la denuncia en Buenos Aires y no es así», reafirmó.
La funcionaria dijo en diálogo con TD Digital que reciben, en promedio,  5 denuncias por mes del departamento Río Cuarto.
«Lo que nosotros buscamos es la concientización de derechos y apuntamos a la  resolución rápida de conflictos. Por ejemplo, hemos actuado en casos de discriminación en la escolarización y en Río Cuarto actuamos en forma urgente junto al Ministerio de Educación», sentenció.

«Xenofobia»

El cantante local Miguel Velázquez relató en diálogo con FM Gospel que cuando quiso pagarle un desayuno a una pequeña que pedía monedas, el mozo se negó a efectuar el pedido señalando que era una directiva de los propietarios del lugar.
“Quise comprarle un desayuno a una niña muy humilde en la confitería Luís María. La respuesta del mozo fue que a esos niños no los pueden atender”, destaca un mensaje enviado al programa Así son las Cosas.
Calificó que se trata de un caso de “xenofobia”  y se preguntó: “¿Es la actitud aislada de un lugar de la ciudad o la manifestación de una de nuestra miserias cotidianas?”

Correo

A través de la Comunidad de TD Digital, se publicó el post de Franco Dichiara, el mozo que atendió a Velázquez, en el que se señala:  «la niña en cuestión junto con sus hermanos y hermanas van todos los días excepto los domingos a vender en nuestro local por lo que ya los conocemos bien».
«Jamás se les prohibió la entrada y jamás se les negó un cafe/helado/desayuno o lo que fuere. Ese día, como los otros, la niña entra al local a vender; al pasar entre las mesas llega hasta el señor Velázquez y este me llama. Al acercarme me encuentro con la imagen de un hombre mayor que le quiere comprar un cafe a una niña que no llegó al negocio con él. Ahora pido perdón pero le dije al señor Velázquez que prefería no hacerlo y en ningún momeno dije «a esos niños no los podemos atender».  Tomé la decisión para cuidar la integridad de la niña, que 10 minutos después tomó un café junto a dos señoras, frente a la columna central del salón…»

Commentarios

commentarios

Compartir