Cincuenta personas murieron, una de ellas menor de edad, y 676 resultaron con heridas de distinta consideración al colisionar un tren que ingresaba a la estación de Once con el paragolpes de contención de esa terminal, informó Claudio Avruj, Subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno Porteño.
El siniestro en el tren de la ex línea Sarmiento se produjo a las 8:33, cuando la unidad 3772 no logró detenerse y embistió el parachoque que marca el fin de las vías, sobre el andén 2. El secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, indicó que la formación circulaba a 26km/h cuando ingresó a la estación.
Claudio Avruj, subsecretario de Derechos Humanos de la Ciudad de Buenos Aires, informó a la prensa que la cantidad de víctimas fatales por el accidente en la estación Once ascendió a 50: 39 cuerpos se encuentran en el cementerio de Chacarita y otros 11 en la morgue judicial.
El gobierno de la Ciudad distribuyó también a las 20 la lista definitiva de heridos: 676 personas pasaron por los hospitales públicos. Hay otros pasajeros que fueron hospitalizados en sanatorios privados, pero no se publicaron sus nombres por decisión de sus respectivas obras sociales.
Al respecto, el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, reconoció que es «una incógnita», cómo sucedió el hecho, ya que la formación ingresó a la estación a una «velocidad habitual», medida por el GPS en 26 km/h.
Los cuerpos identificados fueron trasladados a la morgue oficial, mientras que el resto de las víctimas fatales se encuentran en la morgue ubicada en el Cementerio de La Chacarita.
Sin embargo, pasadas las 23, aún no se había difundido ningún listado oficial con el nombre de los fallecidos.
Por su parte, el vocero de la Policía Federal Néstor Rodríguez señaló que entre los fallecidos hay un menor, mientras que los 49 restantes serían personas mayores de edad.
En tanto, Jorge Lemus, ministro de Salud de la Ciudad, indicó que en todos los hospitales porteños involucrados en las tareas de atención hay al menos «200 heridos de importancia».
«Ninguno en estado crítico, pero son heridas graves», precisó Lemus, quien además explicó que la lista de víctimas fatales «la maneja la Policía Federal».
A su vez, el director del SAME, Alberto Crescenti, confirmó que finalizó el operativo de rescate de todas las personas atrapadas.
El accidente se produjo a las 8:33 de hoy cuando el conductor no puedo frenar la formación -que cubría la ruta entre Once y Moreno- al ingreso de la estación de Once e impactó violentamente contra el parachoques, que se encuentra en el extremo del andén.
Los equipos de rescate finalizaron el operativo luego de cuatro horas de trabajo, en las que se derivaron más de 600 heridos a diferentes hospitales porteños.
Bomberos y rescatistas de Defensa Civil tuvieron que cortar el techo de la formación para poder retirar a los pasajeros que quedaron entre los hierros.
El maquinista estuvo atrapado entre los hierros retorcidos de la cabina de conducción durante más de 30 minutos, cuando el personal de emergencia logró rescatarlo con algunas heridas.
Del operativo de rescate participaron más de 17 ambulancias y dos helicópteros del SAME, además de varias dotaciones de bomberos y un centenar de efectivos de la Policía Federal.
El accidente se produjo poco más de seis meses después de que un tren de la misma línea, concesionada por la empresa TBA, dejara 11 personas fallecidas y más de 200 heridos, luego de que un colectivo de la Línea 92 que atravesaba la barrera ubicada a metros de la estación de Flores fue embestido por una formación, que a posteriori impactó contra el andén de la mano contraria y contra otro tren que descargaba pasajeros.
El impacto de la formación que ingresó a 26 kilómetros por hora a la plataforma afectó los ocho vagones pero en especial a los dos primeros, donde se concentraba la mayor cantidad de pasajeros.
El accidente sucedió cuando la formación «impacta contra el freno hidráulico de contención del andén 2 y esto genera que toda la inercia y toda la fuerza repercutiera en los ocho vagones que integraban el tren», aseguró el vocero de la Policía Federal, Fernando Sostre.
Añadió que «el impacto más fuerte se dio entre el primer y segundo vagón», y que el segundo «se introdujo unos seis metros en el primero».
Sostre agregó que entre el primero y segundo vagón «se localizaron las 50 víctimas» y que en el primero de los vagones «se rescataron a 150 personas» y destacó que, «las causas que provocaron el choque y la falta de frenos se están investigando».
Los rescatistas debieron romper el techo de la formación para sacar a los heridos dado que habían quedado aprisionados unos contra otros, mientras que se utilizaron varios helicópteros para trasladarlos.
El gobierno de la ciudad informó que los heridos fueron atendidos en los Hospitales Álvarez, Durand, Vélez Sarsfield, Penna, Santojanni, Tornú, Fernández, Pirovano, Zubiuzarreta, Piñero, Rivadavia y Argerich.
Del total de heridos «unos 200 personas presentan las heridas más graves con politraumatismos y contusiones» dijo el ministro de salud Jorge Lemus, quien añadió que en el operativo «intervinieron más de 50 ambulancias».
El secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, estimó en un primer momento que el accidente había ocurrido «por una falla en los frenos» pero luego aseguró que «no sabemos porque el tren no paró».
El funcionario precisó que hará una «profunda investigación» del accidente ocurrido hoy en la estación ferroviaria de Once y dijo que el área a su cargo está en «la búsqueda de la responsabilidad y ver por qué fue un accidente» al tiempo que vaticinó que «no llevará mucho tiempo saber lo que pasó».
«Hay mucho material de investigación y todo fue puesto a disposición de la Justicia», aseguró Schiavi y precisó que el accidente alcanzó ribetes de tragedia «porque la mayoría de las personas viajaban en los dos primeros vagones», que fueron los más afectados por el impacto».
El funcionario señaló que el conductor de la formación, de 28 años e internado en terapia intensiva, estaba «descansado» al momento del accidente dado que había tomado el mando del coche en la estación Castelar, al tiempo que señaló que el trabajador ferroviario «tiene una foja de servicios buenísima».
Según Schiavi, el tren que impactó con el andén ingresó a la cabecera porteña «a 26 kilómetros por hora y a 40 metros del final iba a 20 kilómetros por hora» ý añadió: «el tren paró 14 veces y la última vez no paró».
Teresa, pasajera del tren, aseguró que sintió «una explosión terrible, yo me encontraba en el medio del furgón y toda la gente se me vino encima”.
Y añadió que “en Floresta el tren se pasó de la parte donde están los andenes y tuvo que retroceder”.
Lo mismo comentó Elizabeth, quien describió que inmediatamente después de sentir «como una explosión se rompieron los vidrios y comenzaron los gritos».
“Yo subí en Floresta, me di cuenta de que el tren había tenido que retroceder pero no me importó, uno no se imagina que pueden pasar estas cosas”, declaró.
Otro pasajero que también ascendió en Floresta, Cristian, observó que “el tren se tuvo que volver hacia atrás para que podamos subir desde el andén”.
“Cuando estábamos llegando a Once, me di cuenta de que no estaba frenando e inmediatamente sentí una explosión. Todos nos caímos arriba de otros. Yo me fracturé pero todos los que viajaban se golpearon en algún lado”.
Esta noche era incesante el desfile de personas en los hospitales que buscaban a sus seres queridos que no figuran en las listas de heridos en los centros asistenciales.
Sabrina, quien busca a su madre Marcela Gómez, de 44 años, dijo que «hay errores en las listas quizás por eso no la pudimos encontrar ella viajaba acompañada de mi hermana que si pudo ser rescatada».
También eran numerosas esta noche la llegada de personas en la Morgue Judicial de la calle Junín 765, donde intentaban anoticiarse si el ser querido que buscaban estaba entre los cuerpos.
Voceros policiales dijeron que en esa morgue hay 11 cuerpos y los 38 restantes están en la situada en el cementerio de la Chacarita, donde, por disposición del director de esa dependencia, se procedía a identificar a los cadáveres.