Falleció el pasado domingo Humberto Guzmán, uno de los 3 hermanos riocuartenses confirmados como herederos del hacendado Juan Manuel Manubens Calvet, y en el entorno familiar ya hablan de «la herencia maldita».
Humberto sufrió una neumonía y estaba internado desde hacía varios meses. Nunca supo que era un descendiente de los Manubens Calvet, aunque sus hijos ya habían iniciado la pelea por los 500 millones de dólares en disputa.
Juan Carlos, hermano del fallecido, señaló que «es otra tragedia más que se suma a todas las que sufrimos desde que sabemos lo de la herencia».
«Estamos indignados con todos y también con el que era nuestro abogado. No tenemos ninguna certeza de que vayamos a cobrar el dinero. El abogado (Enrique Zabala) nos mintió desde el principio y ni siquiera hizo el trámite de filiación», aseveró.
Por su parte, Gladys Guzmán manifestó que «ni mi hermano, ni mi padre, ni nadie se llevó la herencia»
«Humberto se fue y no pudo ver nada. Antes vivíamos más tranquilos, todos trabajábamos y la peleábamos todos los días. Ahora hay gente que piensa que cobramos, nos amenazan, es terrible», sostuvo.