Desde el área de Hábitat Social, que depende de la Secretaría de Desarrollo Social, ayer por la mañana se entregaron 4 viviendas prefabricas, ubicadas en el barrio Empleados de Comercio, a familias con serios inconvenientes para su supervivencia y en situación de calle.
La iniciativa fue gestionada desde el municipio «con la ayuda desinteresada del empresario Diego Donzelli que aportó los materiales necesarios para la construcción. Los terrenos y la mano de obra corrieron por cuenta del municipio».
En el acto estuvieron presentes el intendente Juan Jure, el director del IMV Raúl Neme, los coordinadores de hábitat social y naturalmente las familias que percibieron “su primera llave”, además del mencionado Donzelli.
Neme explicó que la entrega se dio bajo la figura de comodato, con vigencia por 2 años. Es decir que son prestadas por parte de la municipalidad con la posibilidad de renovación, de acuerdo al interés futuro de cada ocupante.
Según explicó el funcionario la prioridad para la entrega la tuvieron personas o familias con serias dificultades económicas y personales, las cuales “hace mucho tiempo esperaban una casita como estas”.