Estévez recibió los datos que había solicitado al fiscal. Consideró que a la investigación le faltó sentido común. Estévez consideró «inexplicable que el fiscal no cuente con los antecedentes penales de todos aquellos trabajadores que estuvieron en el lugar»
A 5 años del crimen de Nora Dalmasso, el doctor Diego Estévez, abogado de la familia de la víctima, insiste en que se debe buscar a un presunto psicópata sexual y solicitó al fiscal Javier Di Santo un informe con los antecedentes penales de los trabajadores que se desempeñaban en el chalé de la calle 5, en la Villa Golf.
Además, le pidió al fiscal datos sobre «violadores seriales ó delincuentes con antecedentes de ataques sexuales» para determinar si existen nexos con el homicidio que conmocionó a Río Cuarto y el país.
«No están completos los informes que he solicitado, aunque los veré en detalle para conocer qué pueden aportar. Algunos datos no estaban en el expediente y Di Santo debió solicitarlos», indicó Estévez en diálogo con TD Digital.
El asesor de Nené Dalmasso y Juan Dalmasso, madre y hermano de la víctima, respectivamente, dijo que el fiscal «poné el énfasis en otro lado y a esta investigación le falta sentido común».
«No se le dio la importancia que merecía la psita del psicópata sexual, pese a lo que he aportado y lo que dijo el FBI en su informe. No todos piensan igual, ni valoran con el mismo criterio en determinadas circuntancias», opinó.
Estévez consideró «inexplicable que el fiscal no cuente con los antecedentes penales de todos aquellos trabajadores que estuvieron en el lugar»
– ¿No es una mirada clasista apuntar contra los obreros, cuando las pruebas de ADN apuntan a los Macarrón?
– La acusación sobre el viudo y el hijo son una distracción. El tema del ADN Macarrón está bastante justificado porque está acreditado que el viudo antes de partir hacia Uruguay tuvo relaciones maritales con su esposa. También está probado que existe una supervivencia de esos rastros hasta 3 ó 4 días de haber ocurrido. Tengo amigos comunes que han estado con él en Uruguay y está probado que el estaba allí. No hay una connotación de clase en investigar a los empleados, sino una elemental deducción.
Para Estévez, «las únicas personas que sabían que Nora estaba sola, cómo se podía acceder a la vivienda y que la alarma estaba desconectada, eran los obreros».
El abogado afirmó que «no cabe ninguna duda para la abuela y el tío de Facundo, que el joven es totalmente inocente».
«El chico fue imputado con deducciones totalmente alejados del sentido común», argumentó.