Dijo que los sindicalistas no tienen voluntad al trabajo y buscaban cobrar «cosas que no correspondían». También apuntó contra un estudio de abogados.
La disputa entre el gremio de Obras Sanitarias y el Municipio dispuso el final anticipado en la gestión de Tulio Giambastiani y su equipo. Fue una pelea más allá de lo salarial que expuso una creciente tensión en el interior del ente. Los ahora ex directores habían dejado de formar parte de la discusión en la mesa salarial y el diálogo con la cúpula sindical se había esfumado. En ese contexto, Giambastiani pegó un portazo pero también lanzó fuertes acusaciones sobre el manejo de los gremialistas en la EMOS.
En diálogo con TD Digital, el ex titular del organismo aseguró que «los dirigentes que alguna vez nombré» -haciendo clara alusión a Ricardo Tosto, Roberto Tomaselli y Mario Ameri- «actuaban para el beneficio propio y no el de los trabajadores».
El dirigente radical señaló que tomó la decisión de dejar la presidencia del EMOS «para dejarle las manos libres al intendente»
«Hemos estado trabajando hasta último momento en la gestión, pero debíamos ser responsables y presentar una renuncia indeclinable», sentenció.
Giambastiani afirmó que «nunca» cortaron el diálogo con los empleados, aunque denunció que «muchos dicen que tienen la camiseta puesta del EMOS pero no cumplen con sus responsabilidades».
– ¿A qué se refiere con estos imcumplimientos?
– Hay gente que no tiene la voluntad para trabajar todos los días y acá lo que se manejan son dineros publicos, que se deben cuidar.
– ¿Quienes son las personas que cobran sin trabajar?
– Son los mismos que cobran montos excesivos, que duplican lo que percibe el intendente.
– ¿Ustedes lograron enfrentar y corregir esta situación?
– Hemos ido al hueso en muchas situaciones y a algunos les molestó porque se tocaron intereses personales. Tenemos la tranquilidad de haber hecho una gestión transparente, con trabajo y compromiso.
– ¿Qué otras irregularidades advirtieron?
– Algunos pedían permanentes licenciasy querían cobrar cuestiones que no correspondían.
– ¿Qué tipo de beneficios económicos solicitaban?
– Yo estoy fuera de la gestión y no quiero profundizar, pero buscaban usufructos personales y no para los trabajadores. Esto nos obligó a generar un corte. (Antes, en diálogo con FM Gospel había resaltado que Tosto pretendía cobrar 250 mil pesos por vacaciones y que instalaron cámaras para evitar que algunas personas sustrajeran elementos de la EMOS para uso personal)
– En esta disputa con la cúpula gremial, ¿la salida de la cúpula es una señal de que no se pueden erradicar todas estas cuestiones que usted señala?
– Hicimos cambios de gestión y de mejora financiera. Sin embargo, de un día para el otro aparecieron mostrando camiones abandonados y no los que compramos nuevos. Armaron un conflicto político y en esta situación es imposible trabajar.
– ¿Cree que la próxima gestión estará en condiciones de seguir enfrentando estos privilegios irregulares?
– Estas irregularidades provocan situaciones muy difíciles. Nosotros optamos por enfrentarlas, respondiendo al mandato del intendente.
– ¿Las irregularidades solo se reducían a los que ocurría con el gremio?
– Además, decidimos cerrar el contrato con el estudio de abogados de calle Alvear porque ellos cobraban y el ente no recibía un peso. Hicimos un cambio, tocamos intereses, pero decidimos poner un punto final para que el intendente pueda actuar con las manos libres.