El seleccionado nacional venció a los caribeños por 81 a 79 y clasificó a la final del Torneo de las Américas donde definirá con Brasil. Argentinos y Brasileños lograron la clasificación para los próximos Juegos Olímpicos de 2012.
La Selección argentina de básquetbol se clasificó para Londres 2012 tras derrotar anoche aquí Puerto Rico 81 a 79 en el marco de un dramático partido que se disputó el Polideportivo de esta ciudad por una de las semifinales del Preolímpico.
El equipo conducido por Julio Lamas logró revertir un tercer cuarto desfavorable gracias al muy buen desempeño de Emanuel Ginóbili para quedarse con el segundo boleto clasificatorio, ya que en el primer turno Brasil obtuvo la otra plaza gracias a la victoria sobre República Dominicana 83 a 76.
Argentina se impuso con parciales de 29-24, 11-20, 26-16 y 15-19.
Con este resultado el equipo nacional participará por sexta vez en los Juegos Olímpicos -tercera consecutiva-, mientras Puerto Rico, con 9 disputados, tendrá una nueva chance de conseguir su boleto a Londres en un repechaje mundial el año próximo.
El partido resultó sumamente cerrado y el conjunto caribeño tuvo su chance de ganarlo al fallar un triple sobre la chichara.
Argentina sustentó la victoria a partir de los aportes de su máximo anotador Luis Scola 27 puntos, seguido por Ginobili con 23 y Prigioni con 16, respectivamente.
En tanto, José Berea, con 20, fue el máximo anotador del equipo conducido por el polémico Flor Meléndez, mientras que Santiago y Arroyo lo siguieron con 16 y 15 puntos, respectivamente.
El partido se jugó en medio de un clima de alta tensión ya que en la cancha ninguno de los dos equipos quería resignar su chance de clasificarse.
Mientras los jugadores argentinos reclamaban el apoyo del público en un Polideportivo colmado, Meléndez, jugaba su partido en el banco y no perdía oportunidad para reclamarle a los árbitros por sus fallos.
En un momento mantuvo una fuerte discusión con Julio Lamas en la que debieron terciar los jueces para calmar los ánimos.
El equipo argentino, de la mano de la Generación Dorada, alcanzó una victoria tan sufrida como merecida en medio de una lucha que resultó emocionante por su entrega.
El domingo Argentina deberá definir ante Brasil la final del Premundial en un partido programado para las 21.15.
La selección fue arrolladora en el arranque de la mano de Scola que en eso primeros minutos embocó todo lo que tiró durante el primer cuarto que finalizó en favor del local 29 a 24.
Sin embargo, en el segundo cuarto y con Scola fuera de la cancha los boricuas lograron terminar arriba al cabo del primer tiempo 20 a 11 gracias a las anotaciones de sus peligrosos bases José Barea, autor de 12 tantos, y Carlos Arroyo.
Tras el descanso el equipo de Lamas salió decidido a cambiar la historia y sobre la base de un gran sacrificio y una firme concentración logró emparejar el resultado y cambiar el curso del encuentro.
El público se encendió y mientras bajaba desde las tribunas el aliento para la Generación Dorada apareció Ginóbili en toda su dimensión.
Ese pasaje fue un concierto de triples, Barea, Arroyo y Holland por Puerto Rico, Ginóbili (3) y Prigioni (2) por los nuestro se hicieron presentes en el marcador pero al final del tercer cuarto Argentina pasó a ganar 66 a 60.
En el último cuarto, Argentina logró estirar a 11 puntos su ventaja obre Puerto Rico, pero apareció el gigante Santiago bajo la cesta y logró emparejar las acciones.
En ese marco y en medio del nerviosismo de los protagonistas se jugaron los últimos segundos de un parido con tintes dramáticos.
Prigioni erró un libre a 6 segundos del epílogo (81-79) y en la reposición Barea falló el triple sobre la chicharra, dando rienda suelta a la euforia y a los abrazos. El objetivo se había cumplido, Argentina ya estaba en Londres 2012.
El equipo conducido por Julio Lamas logró revertir un tercer cuarto desfavorable gracias al muy buen desempeño de Emanuel Ginóbili para quedarse con el segundo boleto clasificatorio, ya que en el primer turno Brasil obtuvo la otra plaza gracias a la victoria sobre República Dominicana 83 a 76.
Argentina se impuso con parciales de 29-24, 11-20, 26-16 y 15-19.
Con este resultado el equipo nacional participará por sexta vez en los Juegos Olímpicos -tercera consecutiva-, mientras Puerto Rico, con 9 disputados, tendrá una nueva chance de conseguir su boleto a Londres en un repechaje mundial el año próximo.
El partido resultó sumamente cerrado y el conjunto caribeño tuvo su chance de ganarlo al fallar un triple sobre la chichara.
Argentina sustentó la victoria a partir de los aportes de su máximo anotador Luis Scola 27 puntos, seguido por Ginobili con 23 y Prigioni con 16, respectivamente.
En tanto, José Berea, con 20, fue el máximo anotador del equipo conducido por el polémico Flor Meléndez, mientras que Santiago y Arroyo lo siguieron con 16 y 15 puntos, respectivamente.
El partido se jugó en medio de un clima de alta tensión ya que en la cancha ninguno de los dos equipos quería resignar su chance de clasificarse.
Mientras los jugadores argentinos reclamaban el apoyo del público en un Polideportivo colmado, Meléndez, jugaba su partido en el banco y no perdía oportunidad para reclamarle a los árbitros por sus fallos.
En un momento mantuvo una fuerte discusión con Julio Lamas en la que debieron terciar los jueces para calmar los ánimos.
El equipo argentino, de la mano de la Generación Dorada, alcanzó una victoria tan sufrida como merecida en medio de una lucha que resultó emocionante por su entrega.
El domingo Argentina deberá definir ante Brasil la final del Premundial en un partido programado para las 21.15.
La selección fue arrolladora en el arranque de la mano de Scola que en eso primeros minutos embocó todo lo que tiró durante el primer cuarto que finalizó en favor del local 29 a 24.
Sin embargo, en el segundo cuarto y con Scola fuera de la cancha los boricuas lograron terminar arriba al cabo del primer tiempo 20 a 11 gracias a las anotaciones de sus peligrosos bases José Barea, autor de 12 tantos, y Carlos Arroyo.
Tras el descanso el equipo de Lamas salió decidido a cambiar la historia y sobre la base de un gran sacrificio y una firme concentración logró emparejar el resultado y cambiar el curso del encuentro.
El público se encendió y mientras bajaba desde las tribunas el aliento para la Generación Dorada apareció Ginóbili en toda su dimensión.
Ese pasaje fue un concierto de triples, Barea, Arroyo y Holland por Puerto Rico, Ginóbili (3) y Prigioni (2) por los nuestro se hicieron presentes en el marcador pero al final del tercer cuarto Argentina pasó a ganar 66 a 60.
En el último cuarto, Argentina logró estirar a 11 puntos su ventaja obre Puerto Rico, pero apareció el gigante Santiago bajo la cesta y logró emparejar las acciones.
En ese marco y en medio del nerviosismo de los protagonistas se jugaron los últimos segundos de un parido con tintes dramáticos.
Prigioni erró un libre a 6 segundos del epílogo (81-79) y en la reposición Barea falló el triple sobre la chicharra, dando rienda suelta a la euforia y a los abrazos. El objetivo se había cumplido, Argentina ya estaba en Londres 2012.