Fues escasa la precipitación.
Las temperaturas superaron los 30 grados en una jornada de verano que concluyó por la tarde con una tormenta de viento y tierra que azotó a Río Cuarto.
Los vientos alcanzaron una marcada intensidad y se mantuvieron durante varias horas afectando toda la ciudad.
A partir de las 16, se produjo una leve pero persistente precipitación que era ampliamente esperada por los riocuartenses.
La nube de polvo y tierra afectó la visibilidad en calles y rutas y provocó el malestar de los riocuartenses que debieron buscar improvisados refugios debido a las fuertes ráfagas de viento.