La reunión de la Sociedad Americana de Química, que se ha celebrado este fin de semana en la ciudad norteamericana de Denver (Colorado), ha convertido a Marte y la Luna en el centro de todas las miradas.
Varios equipos científicos han centrado sus exposiciones en el planeta rojo, y mientras unos quieren llevar mini-centrales nucleares a tan larga distancia, otros plantean soluciones al problema de la alimentación en un astro que está yermo, aunque pueda haberse encontrado agua helada.
El responsable del proyecto anunció que las primeras plantas de energía nuclear para los futuros asentamientos en la Luna y en Marte ya están en camino.
James Werner, director del Laboratorio Nacional de Idaho del Departamento de Energía (DOE), y su equipo tienen previsto tener una demostración para principios de 2012.
La construcción de estas plantas serviría para producir la electricidad que necesitarían las bases permanentes- habitadas o no- en la Luna, en Marte y en otros planetas a los que pudieran llegar las naves espaciales en un futuro.
Se trata de un proyecto conjunto entre el Departamento de Energía (DOE) y la Agencia Espacial Estadounidense (NASA), que se ha marcado como nuevos retos llegar a un asteroide en 2025 y a Marte en 2030