Dos niños murieron y su padre está grave por el incendio de su casa en Pico Truncado, en tanto un indigente perdió la vida en otro siniestro ocurrido en El Calafate, informaron fuentes policiales de Santa Cruz.
El primer caso sucedió el domingo a la noche en la norteña localidad petrolera de Pico Truncado, cuando por razones que se investigan las llamas afectaron una casa de Mitre al 1500 y causaron graves quemaduras a Ariel Sepúlveda y a sus hijos, un bebé de 18 meses y una nena de 5 años.
Según trascendió en medios locales, cuando se produjo el siniestro que consumió el interior de la vivienda la esposa de Sepúlveda estaba en el hospital cuidando a otro de sus hijos.
Los vecinos intentaron socorrer a la familia mientras llegaban los bomberos, pero por la gravedad de las lesiones ambos niños murieron ayer en el hospital de Caleta Olivia, a donde los derivaron tras una primera asistencia en el hospital local.
El padre de las víctimas seguía internado con el 80 por ciento del cuerpo quemado y las vías respiratorias comprometidas, por lo que su estado era grave.
En otro incendio ocurrido en la madrugada del lunes en El Calafate, 300 kilómetros al noroeste de Río Gallegos, murió un indigente de 40 años identificado como Miguel Cabrera, a quien llamaban «El correntino» y solían ver por el centro de la ciudad junto a otros, consumiendo bebidas alcohólicas.
El hecho afectó una casa ubicada en el barrio Cerro Calafate, en los altos de la villa turística, donde moraban Cabrera y otros tres hombres de los cuales uno logró salir, con quemaduras en las piernas, y pidió auxilio a los vecinos.
De acuerdo con datos de los bomberos, sobre una de las dos camas que había en la vivienda estaba Cabrera, quien según estimaron murió asfixiado por el humo mientras dormía, en tanto uno de sus compañeros sufrió lesiones en las manos al romper los vidrios de una ventana