El puente aéreo de ayuda humanitaria que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) quiere lanzar hacia Somalia tendrá que esperar hasta el miércoles para hacer su primer aterrizaje con 14 toneladas de alimentos. El portavoz del organismo de la ONU en el este de África, David Orr, ha explicado que la falta de autorización aduanera en el aeropuerto de Nairobi (Kenia), de donde iba a despegar el aparato con carga francesa, ha retrasado un día la puesta en marcha del operativo que pretende atacar la crisis humanitaria en el Cuerno de África. Una misión que camina contra el reloj mientras siguen llegando en oleadas desplazados somalíes a la capital. La agencia de Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) ha informado hoy de choques y saqueos en el campo de Badbado, a nueve kilómetros de Mogadiscio y que acoge a alrededor de 28.000 personas.
Hambruna
La crisis humanitaria en Somalia se ha degenerado en una hambruna en las dos regiones de Lower Shabelle y Southern Bakool y aún podría empeorar. Las lluvias torrenciales están afectando la capital, Mogadiscio, lo que hace aún más complicada la vida de miles de personas desplazadas por la sequía que no pueden encontrar refugio. Entre estos, aproximadamente 10.000 familias de las regiones de Bay, Bakool, Lower Juba y Upper Juba, están sin refugio, alimentos, agua y baños, viven en 50 campamentos instalados en la capital, donde cada día siguen llegando personas. En todo el país, cerca de la mitad de la población, 3,7 millones de personas, están en crisis, 2,8 millones de ellos viven en el sur. «El gobierno está haciendo todo lo posible, pero el problema supera todas las expectativas», dijo el Ministro de Salud local del Somalia’s Transitional Federal Government (TFG). En los últimos meses, de acuerdo con el TFG, miles de personas murieron, la mayoría niños, en el sur del país, debido a causas relacionadas con la malnutrición.
La persistente sequía y el conflicto han hecho que la tasa de malnutrición en Somalia sea actualmente la más alto del mundo, con picos del 50% en algunas zonas del sur de Somalia. La mayoría de las personas desplazadas han llegado a Mogadiscio de cuatro de las ocho regiones del centro sur: Bay, Bakool, Lower Juba, Upper y Lower Shabelle. Las zonas más afectadas de estas regiones son los barrios y pueblos de Qansadheere, Xabaal Barbaar, Ufurow, Afgoye Yare, Roobay, Diinsoor, Saakow, Gurabay, Juweri, Il-Baate, Gaduuday, Deemay y Ceel-wareegow. Algunos llegan a la capital después de semanas de camino a pie, otros pagan 500.000 chelines somalíes para llegar, después de haber perdido todo su ganado durante los dos años consecutivos de sequía.
De acuerdo con el Ministerio de la Familia del TFG, cerca de un millón de personas están muriendo de hambre en las regiones de Bay, Bakool, Lower Shabelle y Gedo. Cada uno de los campos de Xamar-weyne y Kanisada, en la ciudad, aloja al menos 300 familias. Según el Integrated Phase Classification, el estado de carestía se declara cuando al menos el 20% de las familias no está en condiciones de alimentarse adecuadamente, la desnutrición aguda global supera el 30% y la tasa de mortalidad supera las dos muertes al día cada 10 mil personas. En los últimos 45 días ha habido cerca de 11.000 víctimas, de los cuales 9.000 en las regiones de Bay, Bakool y Lower Shabelle, el resto en otras regiones del centro sur de Somalia. (AP)
Fuente: El País – AP