El perfil genético de Marcela y Felipe Noble Herrera no coincide con los de víctimas de la dictadura entre 1975 y 1976. Sus datos genéticos se cotejaron con 50 familias de desaparecidos.
El cotejo de los datos genéticos de los hermanos Marcela y Felipe Noble Herrera con los registros del Banco Nacional de Datos Genéticos de criaturas nacidas en cautiverio en 1975 y 1976, arrojaron resultados negativo, de acuerdo con una resolución judicial.
Así lo confirmó anoche el abogado de los jóvenes adoptados por la dueña de Clarín, Ernestina Herrera de Noble, Jorge Anzorreguy, quien indicó que la resolución judicial fue comunicada al resto de las partes.
Según esos informes, el cotejo de las muestras confirma que de los datos asentados en el Banco Nacional de Datos Genéticos de 50 familias de desaparecidos, no existen vínculos con los dos jóvenes presuntamente nacidos en marzo y julio (Marcela y Felipe, respectivamente) de 1976.
La semana pasada se había cotejado con la de dos familias querellantes, Lanoscou-Miranda y Gualdero-García, que también dieron negativo.
Según confirmó Anzorreguy, la juez que entiende en la causa, Sandra Arroyo Salgado, dará a conocer su resolución en forma completa después de la feria judicial de invierno.
La denuncia para que se establezca la identidad de ambos jóvenes había sido formulada por las Abuelas de Plaza de Mayo, quienes hasta el momento obtuvieron el rescate de mas de un centenar de nietos y estima que son mas de 400 los que aún no conocer a sus familias sanguineas.
El abogado de Ernestina Herrera, el ex camarista federa Gabriel Cavallo, confirmó la especie, a la vez que reveló que la jueza negó la posibilidad de habilitar la feria judicial.
Cavallo dió por probado que los hijos adoptivos de Ernestina Herrera nacieron entre marzo y abril de 1976, por lo cual el análisis realizado es «el más importante».
Así lo confirmó anoche el abogado de los jóvenes adoptados por la dueña de Clarín, Ernestina Herrera de Noble, Jorge Anzorreguy, quien indicó que la resolución judicial fue comunicada al resto de las partes.
Según esos informes, el cotejo de las muestras confirma que de los datos asentados en el Banco Nacional de Datos Genéticos de 50 familias de desaparecidos, no existen vínculos con los dos jóvenes presuntamente nacidos en marzo y julio (Marcela y Felipe, respectivamente) de 1976.
La semana pasada se había cotejado con la de dos familias querellantes, Lanoscou-Miranda y Gualdero-García, que también dieron negativo.
Según confirmó Anzorreguy, la juez que entiende en la causa, Sandra Arroyo Salgado, dará a conocer su resolución en forma completa después de la feria judicial de invierno.
La denuncia para que se establezca la identidad de ambos jóvenes había sido formulada por las Abuelas de Plaza de Mayo, quienes hasta el momento obtuvieron el rescate de mas de un centenar de nietos y estima que son mas de 400 los que aún no conocer a sus familias sanguineas.
El abogado de Ernestina Herrera, el ex camarista federa Gabriel Cavallo, confirmó la especie, a la vez que reveló que la jueza negó la posibilidad de habilitar la feria judicial.
Cavallo dió por probado que los hijos adoptivos de Ernestina Herrera nacieron entre marzo y abril de 1976, por lo cual el análisis realizado es «el más importante».