Fueron tres procedimientos en viviendas de personas que frecuentaban la casa de la víctima. Investigan el «entorno peligroso» de la mujer asesinada. Todavía no encuentran vínculos entre el hallazo de ropa con salpicaduras de sangre en una casa de Alberdi y el homicidio de Graciela Rivero.
Redacción Telediario Digital – La Policía realizó esta mañana tres allanamientos en viviendas de personas que frecuentaban la casa de Graciela Rivero, la mujer asesinada en la “Zona Roja” de Alberdi, y los procedimientos direron resultados negativos.
Ayer se había secuestrado ropa con salpicaduras de sangre en otro domicilio y el fiscal Javier Di Santo aclaró en diálogo con TD Digital que “aún no se puede realizar una vinculación entre el hallazgo y el homicidio”.
Los investigadores apuntan al «entorno peligroso» de la víctima para intentar hallar al asesino.
Ningún vecinos aseguró haber “escuchado ó visto algo” la noche del homicidio. Desde la Fiscalía pudieron determinar que la mujer consumía habitualmente alcohol y había mantenido algunas peleas con otros vecinos.
El fiscal solicitó a peritos de Córdoba que determinen si el cuerpo de la víctima refleja rastros de consumo de alcohol ó drogas. Además, intentarán hallar el ADN del presunto homicida.
El crimen se produjo el pasado sábado en la vivienda de calle Pasteur al 1105, en la “Zona Roja” de barrio Alberdi.
La mujer, Graciela Ester Rivero, vivía junto a su hija en una precaria casa y subsistía con la ayuda de su familia.
La víctima fue atacada a golpes de puño y con un arma blanca que le provocó severas lesiones. Rivero se desangró y esto le produjo un shock hipovolémico.
Di Santo señaló que aún no se puede determinar si actuaron una ó más personas, aunque destacó que el arma asesina no se encontraba en el domicilio.
La mujer no ejercía la prostitución, según indicaron sus familiares. Sobrevivía con la venta de bolsitas y otros elementos.
Fue hallada por su hija de 13 años que regresó ayer por la tarde a domicilio y encontró a la víctima envuelta en un charco de sangre. Había secuelas del ataque en otros lugares del hogar, por lo que se presupone que hubo una pelea y Rivero intentó defenderse.
“Se observa en la autopsia un golpe con un elemento contundente y varios cortes a la altura del cuello y en la zona de la cara. Ninguna de las heridas pudieron provocar la muerte pero el derramamiento de sangre generó el deceso”, precisó el fiscal.
En el lugar se hallaron sustancias envueltas en papel y un plato con una sustancia blanca. Se presume que se trataría de estupefacientes.
La mujer recibía habitualmente “muchas visitas” y se investiga en el entorno cuál pudo ser el móvil y los presuntos autores del hecho. Hasta el momento, no hay detenidos.
Foto: Archivo