«No será sencillo identificar los restos de las víctimas de la tragedia aérea»

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Así lo advierten los expertos en la Morgue Judicial de Buenos Aires. Cuando llegaron desde el sur, en la Brigada Aérea de El Palomar, el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, pidió prudencia a los medios.
Los restos de las 22 víctimas del vuelo de la empresa aérea Sol que cayó en la provincia de Río Negro llegaron ayer a Buenos Aires para que peritos de la Justicia realicen las tareas de identificación, pero el juez que está a cargo del caso adelantó que la tarea «no será sencilla ni rápida».
Poco después de las 8:30 de la mañana de la víspera, los restos de las víctimas fatales de la tragedia llegaron a la Base Aérea de El Palomar, para ser trasladados luego a la Morgue Judicial dependiente de la Corte Suprema de Justicia.
Por orden del juez federal de Bariloche Leónidas Moldes, a cargo de la causa, los restos de las víctimas arribaron en un avión Hércules de la Fuerza Aérea, mientras que cerca de la pista aguardaban cinco camionetas de la Policía Federal, para luego hacer el traslado hacia la Morgue Judicial, ubicada en Viamonte y Junín, en el centro porteño.
Allí llegaron con una importante custodia de personal policial a las 10:00 de la mañana, mientras que según trascendió, los estudios de ADN que deberán realizar los expertos podrían demorar varios meses.
El secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, quien se hizo presente en la Base de El Palomar, dijo a la prensa que la determinación de realizar las autopsias en Buenos Aires fue adoptada por el juez Moldes.
«Fue por disposición del juez, que pensó que en la Ciudad de Buenos Aires hay más tecnología para obtener este tipo de información», dijo Schiavi acerca de la decisión de realizar en la Morgue Judicial las pericias para confirmar las identidades de los cuerpos, que quedaron calcinados tras la caída del avión.
El funcionario dijo también que «hay una investigación que comenzó a la media hora de producida la caída del avión», y afirmó que «se está trabajando a todo vapor».
«Cuando los peritos que están trabajando en el lugar (donde se produjo el accidente) tengan la información, la van a conocer a través del juzgado», dijo Schiavi.
A su vez, el juez Moldes, quien interviene en la investigación por una cuestión de jurisdicción, remarcó que se decidió el traslado de los restos de las víctimas a Buenos Aires porque en el lugar del accidente «no podían ser identificados».
El magistrado, en declaraciones a la prensa, agregó: «Dí las directivas para recolectar toda la evidencia; se levantaron todos los restos humanos que existen y de la caja negra, que serán reacondicionadas, preparadas, para su estudio».
«Hubo un impacto muy fuerte y la destrucción fue total. La tarea no es sencilla ni rápida. Lamentablemente esto es muy penoso, hay que tener paciencia», subrayó el juez.
Dijo también que en el lugar donde se produjo la caída de la máquina de la empresa Sol «hay un vallado a los efectos de que no se altere ni haya intromisión de nadie ajeno al caso».
«Se levantaron todos los restos y las partes del avión que van a ser separadas para su estudio», remarcó el juez.

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