Martynyuk presidía la sesión cuando el diputado opositor Oleg Lyashko pidió permiso para tomar la palabra. Luego que Martynyuk se lo negara, el diputado, furioso, le gritó «fariseo»
La respuesta del presidente de la sesión no tardó en llegar. Martynyuk se acercó a Lyashko y le realizó una maniobra de estrangulamiento, tomándolo del cuello y sacudiéndolo hasta que éste cae al suelo.
El diputado logró ponerse de pie y ambos comenzaron a darse empujones, lo que provocó que otros legisladores intervinieran a separarlos.
Enseguida que lograran hacerlo, Lyashko regresó para comenzar su discurso, dirigiendo toda su furia hacia Martynyuk, quien sonríe irónico ante cada mención.