La Policía de la Provincia detuvo en Unquillo al autor del asesinato mediante sacrificio de un niño de 12 años, ocurrido en 2006, en la ciudad de Corrientes.
Ramón Antonio Alegre, de 23 años de edad, fue detenido por personal policial en la localidad de Unquillo. Trabajaba como inspector municipal y se encontraba prófugo. Es el principal acusado de matar a un niño en medio de un ritual satánico en la ciudad de Corrientes. Cuando fue descubierto por personal policial no ofreció resistencia.
El cadáver del niño apareció decapitado y su cabeza fue hallada sin piel ni ojos a pocos metros de distancia, clavada sobre una estaca y rodeada por despojos de lo que habría sido un ritual afroumbandista.
Alegre desapareció cuando el caso tomó estado público y comenzaron a detener a cada una de las personas que participaron de la fatídica ceremonia.
La autopsia reveló días después que el menor fue violado y torturado antes de morir en un descampado situado en las afueras de Mercedes, ciudad situada 230 kilómetros al sudeste de la capital correntina que se vio conmocionada por la brutalidad del crimen.
Por el hecho, el pasado 29 de marzo, siete miembros de una secta kimbanda fueron condenados a prisión perpetua por la Cámara del Crimen de Mercedes, que los encontró responsables del secuestro, violación, tortura y asesinato de Ramón.
La sentencia incluyó además la absolución del pai del rito kimbanda Fermín Reynaldo Sánchez y de la enfermera Mabel Patricia López, por considerar insuficientes las pruebas sobre su presunta participación en los hechos.