La adolescente de 14 años que fue baleada el lunes en la madrugada por dos sujetos que le robaron el celular continúa en estado crítico, mientras que se confirmó la detención de dos jóvenes de 20 y 22 años, quienes fueron imputados por robo calificado y tentativa de homicidio.
La joven se llama Micaela y fue sorprendida cuando volvía a su vivienda junto a su tía tras comprar en un kiosco en el barrio Nuestro Hogar III, en el extremo sur del Gran Córdoba. Allí, fue interceptada por dos delincuentes que, mediante amenazas de arma de fuego, le robaron el celular.
«El que tenía la pistola le dijo: ‘No me batás con la cana’. Después me pidió que le diera algo, pero yo no tenía nada. Se fue para atrás y luego volvió y le disparó», relató la tía de la joven según reproducen diarios locales.
El director del Hospital Infantil de Alta Córdoba, Aldo Joseph, aseguró en declaraciones radiales que es optimista en cuanto a que «los niños y los adolescentes tienen una mayor capacidad para la recuperación que los adultos. No obstante, debemos reconocer que su cuadro es muy grave».
Fuentes médicas explicaron que, si bien no hubo pérdida de masa encefálica, el pronóstico es reservado porque el proyectil le ingresó por la región frontal y está alojado junto al parietal izquierdo.
En este marco, el fiscal de Instrucción a cargo de la causa, Pedro Caballero, imputó a los hermanos Juan y Carlos Ludueña –supuestos autores del delito– de robo calificado y tentativa de homicidio.