Wael Ghonim, el directivo egipcio de Google detenido durante las manifestaciones en Egipto y liberado ayer, conmocionó a quienes los escucharon en una entrevista que otorgó a una cadena privada de TV al reconocer que fue él quien administró la página Facebook «Todos somos Jaled Said» -señalada por ser, junto al Movimiento del 6 de abril, impulsora de la histórica revuelta iniciada el 25 de enero para pedir la renuncia del presidente Hosni Mubarak- y que pasó los doce días de arresto con los ojos vendados y sin saber qué pasaba en el exterior.
Quienes lo escucharon anoche en la entrevista que concedió a la cadena privada Dream 2 quedaron conmocionados al confirmarse que había sido él uno de los que encendió la mecha de la revuelta que mantiene en vilo desde hace más de dos semanas al régimen de Mubarak. Cuando le mostraron imágenes con manifestantes muertos, Ghonim bajó la cabeza llorando.
«Tuve los ojos vendados durante 12 días, no escuchaba nada, no sabía nada», afirmó Ghonim, jefe de marketing de Google en Oriente Medio y Africa, y precisó que fue detenido el 27 de enero y que pasó los días siguientes en manos de los temidos servicios de seguridad del Estado.
Amnesty International había pedido su liberación y dijo temer que pudiera ser torturado, pero el joven aseguró que no le «pasó nada». Y agregó: «No soy un héroe, dormí durante 12 días. Los héroes son los que estaban en la calle, los que participaron en las manifestaciones», dijo, visiblemente conmovido.
Mientras lloraba, Ghonim declaraba: «Quiero decir a cada padre y cada madre que perdieron a su hijo, lo siento, pero no es nuestro error. Juro por Alá que no es nuestro error, es el error de cada uno que se eterniza en el poder y no lo quiere dejar».
Jaled Said, quien da nombre a la página de Facebook que llamó a la protesta, murió en junio pasado en Alejandría. Tenía 28 años. Su familia, respaldada por organismos internacionales, denunció que policías lo detuvieron en un cibercafé de Alejandría y lo golpearon hasta la muerte. Su caso causó conmoción en la sociedad, que protagonizó multitudinarias marchas de repudio. Las redes sociales tuvieron amplia repercusión y las protestas y denuncias comenzaron a plasmarse en la página “We are all Khaled Said” (Todos somos Jaled Said), la misma desde la que se llamó a una rebelión sin precedentes para echar a Mubarak del poder.
Fuente: Clarín