El entomólogo Richard Jones es un reconocido investigador. Y ahora, con la publicación de su libro “Extreme Insects” –una recopilación de las imágenes de los insectos más raros del mundo– se convirtió además en un divulgador científico de peso.
En sus páginas se pueden observar ejemplares que no sólo son “extremos” por su rareza morfológica sino que además están retratados en situaciones inusuales, que los hacen aparecer más extraños todavía. Un ejemplo: las hormigas pote de miel en el momento de mayor acumulación de néctar en su abdomen, cuando su cuerpo adquiere la forma de una bola amarilla . Pertenecientes a los géneros Melophorus y Camponotus , son una fuente importante de azúcar para los aborígenes australianos que viven en las regiones más áridas. En el libro de Jones, que no se vende en el país, aparecen en su máximo esplendor.
El investigador también consideró extrema a la mariposa Stauropus fagi, cuya larva parece una langosta y es considerada como “el insecto más feo del mundo”. Pero las verdadera estrella del volumen es la mariposa de alas de cristal, que es tan transparente que ninguna especie del mundo animal la iguala en esa característica.
Más rarezas: el Asbolus verrucosus o escarabajo fantasma, que es el insecto más blanco. Otro escarabajo, el bombardero, es el más venenoso; puede lanzar sustancias químicas que liquidan a su oponente en cuestión de segundos .
La forma del cuerpo, y no sólo su color o hábitos, es otra condición extraña que destacó Richard Jones. Así aparece en su lista el Trachelophours giraffa , que podría figurar en el Guinness como el insecto de cuello más largo.
En el libro, editado por Harpers Collins, se destacan además las especies con territorio más extenso . Es el caso de los mosquitos, que últimamente expandieron sus dominios. El ejemplo que cita el científico es el del Aedes albopictus , que puede transmitir enfermedades. Se extendió desde el sudeste asiático hacia América del Sur y Africa a través del comercio de neumáticos usados.