Gracias a una iniciativa del zoológico de la ciudad de Mendoza, si su hijo le pide una mascota tiene una mayor gama de opciones: desde un pony hasta una cabra de cuatro cuernos, pasando por un búfalo de la India, hasta llegar a un ciervo rojo o pintado, todos en excelente estado de salud. En total, serán 500 especies en cautiverio que saldrán a remate.
Pero, desde ya, no cualquiera podrá comprarlos, sino que primero habrá que estar inscripto en la Dirección de Recursos Naturales, de manera de garantizar su cuidado.
Además, hay que tener en cuenta que cada animal consume en promedio $ 2.400 anuales en alimento, ya que el Zoo tiene previsto ahorrase $ 1,2 millón en comida por los 500 animales.
Con ese dinero tienen pensado mejorar algunas jaulas y corrales que hace más de 30 años están en las mismas condiciones. Los osos polares son un claro ejemplo: desde hace tiempo necesitan un nuevo espacio para poder reproducirse y para que su calidad de vida no desmejore por las condiciones en las que viven.
La nueva residencia de los osos requiere de un desembolso de $ 800.000, pero la asignación presupuestaria llevará un largo tiempo, ya que primero la Legislatura debe aprobar nuevos fondos para la provincia. Para no quedarse en compás de espera, las autoridades que comandan el zoológico hicieron un brainstorming para tratar de dilucidar entre todos qué opciones tenían. Y ahí, en ese escenario de tormenta de ideas, como si se tratara de publicitarios creativos para un nuevo spot, uno saltó de la butaca y dijo: ¿Y si hacemos una subasta? Primero pareció una locura, pero a falta de otras ideas mejores se pasó a la fase de implementación.
Fuente: El Cronista