Hoy se lanza oficialmente la candidatura de Cristina Kirchner a la presidencia. La idea es continuar y profundizar el modelo. Algo difícil de lograr. La corrupción crece en el Gobierno de su marido de forma exponencial. Pasó en semanas de una simple bolsa de 80.000 dólares a una valija de 800.000. Matemáticamente Cristina debería llegar en el próximo escándalo a los 8.000.000 de dólares para seguir el modelo actual al pie de la letra.
Pero el cambio recién empieza. Por lo visto, también habrá que seguir financiando aviones privados alquilados. Primero fue la secretaría de medio ambiente. Luego el helicóptero presidencial a 3500 dólares la hora. Ahora este caso de un vuelo pagado (90.000 dólares) por el gobierno, con funcionarios Argentinos, y anunciado al aeropuerto de destino como transportando funcionarios de presidencia de la Nación. En el medio el contrabando de dinero que provoca, como siempre, apartamiento de jueces y un ambiente saturado de olor a corrupción. Ahora los gobiernos de Venezuela y el nuestro propio se lavan las manos. Es una cuestión de un privado, que nada tiene que ver con los países dicen. Debemos creer que en un avión de 10 plazas financiado con fondos oficiales y comitiva presidencial sube un desconocido hoy con pedido de captura internacional. Es el nivel de seguridad oficial!!
Contextualizando el hecho, queda claro que este gobierno nunca aclara nada. Ha enfrentado continuamente hechos que dejan a la población sin respiro. El contrabando de drogas de Southern winds nunca se aclaró. La investigación sobre el pago bloqueado al grupo Greco por doscientos millones de dólares que no prospera. Los sobreprecios para la construcción de prisiones que se olvida. El caso Skanska de las facturas truchas que está estancado. El despilfarro de la Secretaría de Medio Ambiente que quedó como un detalle en el olvido. La bolsa de dinero de la Ex Ministra Miceli aparecida en su baño Ministerial todavía sin aclarar. La exportación de armas desde el Ministerio de Defensa ridículamente subvaluadas de la cual ya nadie habla. Ahora el contrabando de dinero en aviones pagos con impuestos de los argentinos que provoca el apartamiento esperado de los jueces. Es un ejemplo de manual de la vida moderna líquida hecha de una serie de nuevos comienzos, o como una historia de finales sucesivos. Finales sin aclarar por supuesto.
Por supuesto, la profundización del modelo requiere además un atril donde gesticular enojado. Donde se hable con ironía, y se rete a la población atónita. Por no comprender que hay espíritus del mal sobrevolando gobernantes a quienes quieren impedirles que “el progreso” alcanzado continúe. Requiere un dedo acusador, quien sabe señalando a quien, mientras las autoridades cuasi bañadas en agua bendita, se rodean de una ciénaga de escándalos que crece y amenaza con asfixiarlos. Eso lo tendremos esta tarde. Habrá sobreactuación. Mucha política del caracol donde seguidores fieles se arrastrarán para estar en primera fila. En el autismo y aislamiento del matrimonio real nada hará sentir que la gente entiende la patética situación de un gobierno que se muestra incapaz de investigar nada, que no consigue detener a delincuentes que viajan en aviones pagados por impuestos y que es incapaz de controlar siquiera la estructura de sus funcionarios más íntimos. Que no obtiene una explicación para tanto delito, corrupción y comportamientos ilegales.
Lo peor sin embargo, es el daño que se hace a la cultura democrática. Se empieza a sentir que ya nadie cree nada. Que hay “frío” en la gente. Las encuestas muestran que muy pocos creen en la independencia del poder judicial.
Que en gran medida el sentimiento refleja que la corrupción invade los Gobiernos. Que hay astío y cansancio. Que no hay explicaciones ni respuesta para nada. Sólo atriles agresivos para el pueblo, y vestidos fastuosos enmarcados en visitas cuidadosamente pautadas en el exterior. Para nosotros los sonidos del silencio. Para los extranjeros las sonrisas fotográficas.
Pero el pueblo quiere saber de que se trata. Mucha gente querrá saber esta tarde como vamos a salir de la inflación reprimida y amenazante. Como vamos a enfrentar la desacumulación de capital y de reservas de energía. Como vamos a enfrentar tanto circulante emitido en un entorno sin confianza. En un país donde más de la mitad de los depósitos en pesos está colocado como máximo a 60 días. Donde los depósitos en pesos entre seis meses y un año han caído en el último mes un 38 %. Donde en el medio de un tembladeral financiero mundial hay fuga de capitales. Donde los depósitos en dólares a más de un año crecen al 98 % desde hace un año. Donde no se cree en el peso y hay huída sostenida al dólar. Ahora que todavía se consiguen.
Los Argentinos querrán saber como se hará para no aumentar más el gasto público por encima del crecimiento del ingreso sin tocar los subsidios y sin que los precios suban donde equilibradamente deben estar. Como se va a hacer todo eso en medio de salarios confiscados por la inflación pasada y la por venir. Los argentinos querrán saber como los casi 180.000 millones de depósitos en pesos o los casi 58.000 millones de dólares a que equivalen esos depósitos se van a enfrentar con reservas inferiores a los 25.000 millones una vez descontada la deuda del banco central en Lebacs.
Hoy los Argentinos van a asistir nuevamente al teatro. A una fiesta electoral. Justamente cuando el iceberg hundido reclama urgente el cambio de rumbo de nuestro barco. Entre las luces de bengala el tiempo se acaba. Ojalá predomine la cordura más allá del parroquialismo actual envuelto en el barro de la soberbia y salpicado por la corrupción de su propia estructura…
Dr Roberto Tafani