Los accidentes rurales y los niños

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Durante la pasada semana los medios de comunicación informaron de dos sucesos trágicos en nuestra región,  en los que perdieron la vida niños, y que estuvieron relacionados con accidentes rurales.
Es bueno recordar que la palabra “accidente”  no significa fortuito, o debido al azar. Los accidentes son circunstancias imprevistas pero no imprevisibles, y SE PUEDEN EVITAR  en la gran mayoría de los casos.

Cómo? Teniendo en cuenta las situaciones de riesgo, tomando las precauciones necesarias, vigilando estrechamente a los niños, colocando barreras y medidas físicas de protección.
La mayoría de los accidentes que ocurren en el campo en menores de 18 años suceden en niños que no están realizando tareas específicas. Son niños que viven en el lugar, acompañantes de los adultos, o simplemente espectadores casuales de las tareas rurales.

GRAVEDAD
A diferencia de los accidentes domésticos, los accidentes en el campo son menos frecuentes pero MUCHO MAS GRAVES, siendo en la mayoría de los casos causa de internación por heridas graves, y aún de muerte.

MECANISMO
Los accidentes rurales pueden ocurrir en varias circunstancias, pero las más comunes son las siguientes:
• Maquinarias: Tractores, cosechadoras, tolvas, “chimangos”, motoguadañas, motosierras, silos, etc, etc, todas constituyen un peligro potencial. La persona adulta que maneja una máquina no puede a la vez estar prestando atención ni cuidando a un niño.
• Animales: Los niños pequeños pueden recibir patadas de los caballos, o ser agredidos por otros animales domésticos. Los niños mayores y adolescentes pueden sufrir caídas o golpes al montar a caballo si no saben hacerlo.
• Plaguicidas: Hace algunos años los plaguicidas eran causa bastante frecuente de intoxicaciones severas y hasta mortales. Si bien todavía suceden accidentes por esta causa, afortunadamente existe una mayor conciencia de la peligrosidad de los agroquímicos para las personas. Las empresas cuidan mejor el correcto envasado y el desecho de recipientes, y los operarios que las manipulan toman mayores medidas de precaución.
• Agua: Los ríos, piletas, tanques y lagos constituyen sitios de riesgo. Las edades en las que el ahogamiento es más común es en niños pequeños de 1 a 4 años (que a veces pueden ahogarse en pequeñas cantidades de agua), y en adolescentes. En estos últimos, la causa por lo general es una exposición innecesaria al riesgo, por ser sitios de aguas profundas desconocidas, o por no saber nadar correctamente.

MEDIDAS DE PREVENCION

Las tareas rurales y el lugar donde se realizan son un riesgo concreto para los niños pequeños, aun con la presencia de adultos cerca.
Es importante para los niños pequeños colocar barreras físicas de contención: estanques, piletones y molinos deben cercarse.

• No dejar a niños solos cerca de maquinarias
• Nunca transportar a niños en tractores y cosechadoras
• Los adolescentes podrán participar de las labores de acuerdo a su madurez y aptitud física, y siempre bajo supervisión

Un adulto debe enseñar a los niños a montar, indicarle los riesgos y recordárselos. Las mascotas deben elegirse adecuadamente, y su manejo debe ser responsable.
• Nunca permitir a niños pequeños estar cerca de caballos o ganado
• No permitir que niños mayores o adolescentes monten a caballo si no saben hacerlo
• Debe haber cercos que separen siempre los animales del lugar donde están los niños.

En cuanto a las sustancias tóxicas, deben guardarse con llave y fuera del alcance
• No almacenar plaguicidas en la vivienda
• Conservarlos en su envase original bien cerrado
• No utilizar otros envases
• Desechar los envases vacíos en lugares adecuados

Los padres deben recordar que la supervisión estrecha de los niños por parte de un adulto responsable es indispensable, pero no siempre suficiente, y que es necesario además evitar la presencia de los niños en sitios peligrosos.

Por la Dra Ingrid Waisman MP6508 MEsp 2749

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