Las personas siempre buscan destacarse en algo. Las mujeres desean exponer sus atributos naturales, aunque sea con algunos postizos. Los hombres usualmente se sacrifican en los gimnasios tratando de desarrollar músculos, aunque sea tomando anabólicos. Otros traen virtudes de nacimiento que la exhiben para deleite del gran público. Ya sea en deportes, artes o ciencia personas nos muestran su inteligencia. La opinión de Juan Bell en el artículo completo a continuación.
Otros muchos ante la falta de personalidad, conocimientos o capacidad mental solamente se conforman con llamar la atención de la gente haciendo ruido. Entonces adaptan los caños de escape para que los decibeles suban a límites superiores a los permitidos. No les importa la hora y sin consideración por los demás, pasan por las calles, preferentemente céntricas, buscando la mirada de los paseantes.
Pero su mente no les da para más que eso. Y tal es así que no piensan en que cientos de personas se están acordando de sus parientes más cercanos. Las autoridades se concentran en los sonidos que se escapan de las confiterías bailables pero no actúan sobre los vehículos. Eso puede ser un buen ingreso por multas por violación a la reglamentación vigente, pero ¿a alguien le interesa? Se pone en duda.
Tenemos una ciudad muy ruidosa y con gente desaprensiva y desconsiderada. Sería interesante conocer los domicilios de esas personas y a la hora de la mañana en que ellos descansan, devolverles la misma moneda. Es que los que tienen dinero, pagan las multas o buscan a algún pícaro abogado que le impugne las sanciones. Estamos en el camino del ojo por ojo, a pasos agigantados.
Es la falta de personalidad que hace que la gente sea así, además de falta de educación.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
belljuanroberto@yahoo.com.ar
Río Cuarto
18/08/06