La falta de una política ganadera en el país y las consecuencias económicas es el planteo y el análisis de Claudio Forlani de la Fundación EGE.
El conflicto desatado entre el Gobierno y los productores ganaderos por la suspensión de las exportaciones de carne bovina, desnuda la falta de visión de largo plazo y la carencia de ideas de los sectores involucrados.
La recurrencia a implementar planes ganaderos que casi invariablemente ponen el acento en la desgravación impositiva y en créditos subsidiados, dejan traslucir el conflicto fundamental que se esconde: el compromiso existente entre consumo interno y el aprovechamiento de las oportunidades externas, que se le presentan a la ganadería argentina como pocas veces en los últimos años.
Hoy no existe posibilidad, con el stock y los indicadores de productividad actuales, de satisfacer una demanda interna vigorosa y a mercados del exterior dispuestos a pagar buenos precios.
La solución pasa por aumentar la tasa de extracción, la tasa de marcación de vientres y aprovechar áreas con potencialidad ganadera. Pero para eso necesariamente se requiere estabilidad de las reglas de juego y que el productor perciba el valor pleno por su producción, esto es, sin retenciones ni prohibiciones.
Aunque esto casi seguro conlleva el costo de que a corto plazo aumente el precio de la carne al público, es la única forma genuina de solucionar la disyuntiva entre consumo interno y ventas al exterior a mediano plazo.
No tiene mayor sentido ofrecer créditos a tasas subsidiadas cuando los productores agropecuarios destinaron sus excedentes a la construcción en lugar de invertirlos en ganadería, al mismo tiempo que no existen facilidades crediticias para otros sectores sociales y actividades más vulnerables
De haber tenido una visión de medio y largo plazo, como hicieron Brasil y Uruguay, podríamos estar conquistando mercados del exterior con nuestras carnes y simultáneamente satisfacer la demanda interna con calidad, cantidad y precio.
En definitiva no existen y menos a corto plazo, soluciones gratuitas para este problema. Pero las medidas tomadas desde noviembre del año pasado a esta parte sólo logran mejorar la situación inflacionaria en el corto plazo a costa de hipotecar la producción ganadera.
Claudio Forlani
info@fundacionege.org
05/07/06