La Policía de Córdoba desbarató una organización que se apoderaba de equinos y los comercializaba. La Justicia investiga los hechos.Personal policial de la Subcomisaría Abilene logró desbaratar una banda
dedicada a la sustracción de equinos y su posterior venta, previo efectuar
una serie de maniobras que apuntaban a desfigurar el animal para que no
pudiese ser reconocido por su dueño.
El día nueve de febrero, Antonio Manuel Guidoni, de 62 años con domicilio en Río Cuarto
denunció que de su campo ubicado en la zona rural de Cuatro
Vientos, previo ingresar a un galpón y sacarle cuatro monturas completas,
con sus correas, le habían sustraído cuatro equinos de raza árabe, de puro
pedigre, mansos de andar, entre tres y cuatro años de edad, de entre 500 a
700 kg cada uno, sin marca ni señal como es característico para los animales
que poseen pedigre.
Los investigadores policiales establecieron que el delito podría estar
relacionado con una persona que conocía a la perfección el lugar.
justamente surgió de la investigación que no sería ajeno al hecho un
habitante de la zona de Cuatro Vientos que se dedicaba en forma
independiente a efectuar trabajos rurales logrando de esta forma tener un
acabado conocimiento de los campos y caminos del lugar.
Los animales habían sido retirados del campo andando para luego
ser cargados en un camión de una persona con domicilio en Adelia María que
alquilaba una quinta en el sector Sur de la ciudad de Río Cuarto. A ese
lugar fueron llevados los animales y con otras personas, se procedió a
cambiar la apariencia del animal, cortándole la cola, tuzando las crinas Y
modificándoles el tamaño de los bazos.
En esta maniobra entraba en juego una tercera persona dedicada a la compra y
venta de animales equinos, oriundo de la ciudad de Río Cuarto, quien
facilitaba su marca y señal, legalmente adquirida, para remarcar los
animales.
Conociendo los movimientos de los delincuentes, la policía les permitió continuar
actuando para conocer que destino final tendrían los equinos y es así que se
logró detectar que los mismos serían entregados en una firma comercial
dedicada a esa actividad en la ciudad.
Estos cuatro equinos, fueron trasladados hasta una firma comercial dedicada
a la venta de equinos y en el preciso momento en el que descargaban los
animales la policía procedió al secuestro de los mismos y la detención del
transportista y del vendedor de caballos que facilitaba la marca y la
señal. Dentro del camión también estaban las monturas sustraídas a Guidoni.
Además se secuestró documentación relacionada con el hecho y elementos
probatorios.
De esta forma se logró desbaratar una banda que operaba en esta zona y que
no sería ajena a otros hechos de similares características que se habrían
cometido en nuestra zona de influencia.
En resumen la organización actuaba de la siguiente manera: un
conocedor del lugar levantaba el animal, un transportista lo trasladaba
hasta una quinta que alquilaba en Río Cuarto, allí se desfiguraba
el animal y se lo remarcaba utilizando una marca propiedad de un vendedor
de equinos de la zona con el cual estaban conectados. De esta forma
trasladaban al animal al lugar donde se comercializaba pero para ello
esperaban el momento oportuno que era justamente cuando una firma comercial
dedicada a los equinos, sacaba los animales para su traslado. Era allí
cuando aparecía el transportista, el vendedor y los equinos sustraídos,
acompañados de una guía llena pero no certificada, aduciendo que no habían
tenido tiempo para hacerla autorizar y como el camión de la firma receptora
estaba por salir se los recibían e inmediatamente los pasaban de un camión a
otro y salían con diferentes destinos, uno podía ser frigorífico, otro podía
ser remates, etc. De esta forma se desaparecían los posibles rastros a
seguir y los animales eran sacados rápidamente de la ciudad.
Se continúa trabajando para determinar mayores pruebas al respecto para
aportárselas a la justicia. Por el momento el Fiscal de Instrucción de
Primer Turno, Secretaría a cargo del Dr. Garay ha ordenado que los demorados
fueran puestos en libertad mientras se continúa investigando.