El Intendente y funcionarios municipales visitaron la planta de tratamiento cloacales del EMOS. Fue la última etapa de una recorrida por distintas obras públicas que se están haciendo en Río Cuarto.Previo a la puesta en funcionamiento definitivo de la Planta de Tratamiento de Líquidos Cloacales, el Emos realiza pruebas hidráulicas periódicas que demuestran que se procesa durante los momentos de pico máximo, el 75 por ciento de los efluentes cloacales.
La Ciudad de Río Cuarto genera diariamente 30 millones de litros de líquidos cloacales que son arrojados al cauce del río sin ningún tipo de tratamiento. Ante esta situación el Gobierno de la Ciudad elaboró un proyecto integral cuyo principal objetivo es restaurar y refuncionalizar la Planta de Tratamiento de Líquidos Cloacales.
El Intendente Cantero y una comitiva de funcionarios y periodistas visitaron en horas de la mañana del viernes la vieja planta ubicada a 6 kilómetros de la ciudad que permaneció abandonada por más de 30 años. Fue la última escala de una recorrida de las autoridades por distintos barrios que incluyó la inauguración del Paseo de la Colmena e inspecciones a las obras de desagües y de dos grupos habitacionales en construcción.
Luego de estudios y cálculos para adaptarla a las nuevas exigencias se comenzó con las tareas de limpieza y desmalezado para comprobar el estado estructural de la misma. Una vez realizadas estas tareas y revisados todos los componentes del establecimiento se comprobó la factibilidad de su reparación la que se inició a mediados de junio de 2002.
El tratamiento que realizará la refaccionada planta de líquidos cloacales podrá reducir un 75 por ciento la contaminación generada al río Cuarto.
El proceso de depuración tendrá como primera etapa el tratamiento de los líquidos cloacales a través de cámaras de rejas y dos piletas de sedimentación primaria, donde los sólidos que traen los efluentes son separados. El proceso continúa en los cuatro lechos bacterianos o lechos percoladores, donde la carga orgánica de los líquidos es digerida y eliminada. Estos lechos biológicos funcionan a través de una masa de microorganismos que se forman en las piedras que este contiene por donde circula el agua que va perdiendo la carga contaminante residual al contacto con las piedras. Una vez tratados los líquidos pasarán a una laguna de sedimentación secundaria, para ser finalmente reutilizados en sistemas de forestación. Estas nuevas tecnologías basadas en el aprovechamiento de la carga orgánica del agua para riego, permitirán fertilizar los suelos y optimizar el tratamiento de los residuos líquidos de la ciudad.
La inversión requerida para la refuncionalización del establecimiento y la implementación de un sistema forestal de 80 hectáreas, ronda los 150 mil pesos, cifra sensiblemente inferior a la que implicará la construcción de una nueva Planta.