A los 47 años falleció el ex boxeador Mario Domingo Vizcaya quien había logrado en 1982 el título argentino en la categoría liviano juniors.Mario Domingo Vizcaya vivió su momento de gloria como boxeador cuando en el año 1982 logró coronarse Campeón Argentino de Boxeo en la categoría liviano juniors. Quería ser campeón sudamericano pero no pudo lograrlo. El boxeo, que le dio sus mayores alegrías también le hizo padecer algunos sinsabores. Su pasión por los guantes había comenzado cuando aún era un niño, a los 9 años. Pero más allá del logro obtenido y pese a sus deseos de continuar en el box profesional, no pudo hacerlo y debió abandonar sus sueños. Intentó insertarse en la actividad laboral pero no pudo hacerlo. “El siempre fue jornalero, nunca tuvo un oficio especial”, rememora su hermana quien pese al dolor de la pérdida aún esboza una sonrisa por el recuerdo de Mario, que “era una excelente persona, humilde, que luchó pero no llegó”, dice Liliana Vizcaya. “No se le daban las cosas, mucho tuvo que ver la infancia que tuvimos, la vida del boxeo, después largó el boxeo y se desmoralizó del todo”.
Una grave afección pulmonar comenzó a restarle vida, “se le rompieron los elásticos del pulmón, por lo que le ingresaba el aire pero no lo podía despedir y entonces corría el riesgo de un paro respiratorio que fue finalmente lo que le quitó la vida”, describe su hermana.
Vizcaya aguardó vanamente una mochila de oxígeno que se gestionó ante el Ministerio de Salud y que llegó –tarde- 9 meses después cuando ya las chances de sobrevivencia del ex campeón eran escasas. Internado desde hacía más de un año en Terapia Intensiva del Hospital Central, se fue el miércoles 6 de este mundo en el que pese a luchar día a día por una vida mejor, debió sufrir la peor derrota, la del olvido y la decadencia.